Un porcentaje importante de los jóvenes profesionales originarios de países del tercer mundo emigran para encontrar empleos en el exterior en naciones más prósperas y menos convulsionadas. Esto sucede debido a que al ser personas jóvenes y sin experiencia el encontrar un empleo para estudiantes recién egresados en su país es mucho más complicado. Por lo que sin duda, este cambio de aire trae consigo una experiencia repleta de aprendizaje pero que al mismo tiempo requiere una serie de prerrequisitos legales para garantizar el éxito de la travesía.
Antes de tomar la decisión de buscar nuevos horizontes, hay que preguntarnos si nuestro desplazamiento será por un breve espacio de tiempo para encontrar un alquiler temporario o, por el contrario, tenemos la expectativa de enraizarnos en otro país de forma indefinida. Por ejemplo, la Unión Europea ofrece la posibilidad de trabajar, por períodos limitados, sin ningún tipo de permiso especial en oficios poco calificados. Igualmente, si deseamos establecernos en ese territorio de forma indefinida y ejercer nuestra profesión, son obligatorios la homologación del título y los permisos de trabajo para estudiantes y residencia.
Por otro lado, cualquier extranjero que desee trabajar en el territorio de los Estados Unidos debe obtener una visa de trabajo sin ningún tipo de excepción.
¿Qué hacer para trabajar en el exterior?
•Averiguar si a los ciudadanos de tu país se les exige visado para ingresar a tu destino internacional. En el caso que tengas que solicitarla debes dirigirte a la Embajada o Consulado de la nación extranjera con tu pasaporte vigente.
•No olvides que existen diferentes tipos de visa. Asesórate con las autoridades competentes y solicita la que realmente necesitas.
•Contacta organizaciones que manejan recursos humanos a nivel internacional.
•Aprovecha la experiencia de otros. Las agrupaciones de profesionales en el extranjero son muy activas y siempre están dispuestas a ayudar. También puedes conseguir información en Facebook o en blogs.
Sin lugar a discusión, vivir en el exterior es una oportunidad que todos deberíamos experimentar pero que demanda organizarse con anticipación. ¿Asumirás el reto?
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