Resulta curioso como mucha gente cuando se queda sin trabajo esconde su situación y evita hablar de ello. Tal vergüenza sienten que incluso hay casos extremos que ocultan el hecho hasta a su propia familia.
Pero ese comportamiento erróneo no hace sino agravar más aún la situación. Porque si algo hay que hacer es pregonar a los cuatro vientos que ya no tienes trabajo. O, mejor aún, que te encuentras abierto y dispuesto para nuevos retos y oportunidades. Debes movilizar tu red social para que te informen de cualquier oferta de empleo que sepan.
Hay que ser proactivo y no quedarse parado.
La idea fundamental es mostrarse proactivo durante este periodo. No estar nunca parados y tomarse muy en serio la labor de buscar un nuevo trabajo, formarse o reciclar conocimientos. Estas cosas serán valoradas muy positivamente a la hora de postular por nuevos empleos.
Volver al trabajo
Para conseguir la meta propuesta hay que trabajar con método, tesón y auto-disciplina. Porque nada en este mundo es gratis y las cosas se consiguen con esfuerzo. Por lo tanto, hay que plantearse seguir una serie de pasos básicos para lograr encontrar un nuevo empleo.
1.Informarse sobre los pasos a seguir: el trabajador debe iniciar con cierta urgencia la tramitación de la prestación por desempleo o subsidios que le puedan corresponder en función de su cotización.
2.Identificar nuevos caminos profesionales: la situación de desempleo puede ser el punto de partida para una nueva situación profesional. Según el estudio elaborado por Randstad, el 65% de los profesionales españoles reconoce que no está trabajando en algo directamente relacionado con sus estudios. Retomar la vocación profesional puede ser un buen comienzo.
3.Buscar empleo: No conviene demorar más de 15 días la búsqueda de empleo. Actualmente Internet es la herramienta básica para acceder a ofertas de empleo, ya que uno de cada tres trabajadores reconoce que su último empleo lo consiguió a través de esta herramienta. Además es una herramienta válida para cualquier lugar o sector profesional: uno puede, por ejemplo, buscar ofertas de empleo Barcelona o trabajo sanidad para acotar la búsqueda. Pero no hay que desestimar otras acciones: contacto directo con compañías, acudir a agencias de intermediación laboral, etc.
4.Preparación de herramientas: el candidato debe dedicar tiempo a la preparación del currículo, así como de la carta de presentación con los que comenzará una nueva etapa de tu vida. La mejor opción es realizar modelos específicos para cada puesto al que se pretenda optar.
5.Realizar un argumentario: el candidato debe valorar todo lo que ha conseguido y desarrollado profesionalmente y realizar un argumentario sobre su experiencia. De esta manera será más sencillo destacar sobre el resto de candidatos, tanto en el CV como en la posible entrevista.
6.Preparar la entrevista: el candidato siempre debe preparar con la suficiente antelación una entrevista de trabajo, pero en el caso de despido es especialmente importante, ya que sin duda preguntarán sobre los motivos que desencadenaron la salida de la empresa. El interesado debe responder con honestidad y confianza ante las posibles preguntas.
7.Aprovechar para desarrollar nuevas habilidades: mejorar los conocimientos que necesitaba en su anterior empleo o buscar aquellos que le hubiera gustado poseer para promocionar son algunas de las posibilidades de formación que el candidato debe plantearse. Junto a ellas, siempre debe tener en cuenta el dominio de un segundo idioma o el desarrollo de conocimientos informáticos.
8.Mover la red de contactos: recuperar y mantener una lista actualizada de contactos es fundamental para conseguir un empleo, ya que permite estar en contacto directo con el mercado laboral.
9.Reciclaje: el periodo de desempleo puede ser utilizado para dar un nuevo giro profesional. Emprender un negocio propio, preparar una oposición o buscar una nueva salida profesional son algunas opciones. Además, hoy por hoy existen cursos gratuitos para desempleados, que puede uno aprovechar y sacarles partido.
10.Seguir intentándolo: tras un periodo de búsqueda, si no se consigue un empleo, no se debe caer en lamentaciones personales, ya que puede estar motivado por las propias circunstancias de la economía. El consejo: seguir insistiendo y ser proactivo en la búsqueda de trabajo.
Sobre todo, no hay porqué ocultar la situación de desempleo. Porque no tiene porqué deberse a una situación personal de bajo rendimiento o incapacidad del trabajador. Resulta positivo (e incluso bien visto a los ojos de los posibles empleadores) un plus de auto-confianza que procede de no tener vergüenza en reconocer que se está en un periodo de cambio entre dos trabajos. Ya no hablamos de parados, sino de profesionales en transición, y eso supone un estatus diferente, una nueva actitud, una identidad peculiar (que hay que mantener y cultivar), una filosofía de vida y una dedicación profesional específica.